sábado, 7 de marzo de 2009

Astaroth




Hoy voy a hablar de un demonio, llamado Astaroth y la letra de una cancion que fue compuesta para él.

Astaroth es el "gran duque del Infierno", de la primera jerarquía demoníaca, en la que también pertenecen Belcebú y Lucifer; sus principales ayudantes son tres demonios llamados Aamon, Pruslas y Barbatos. En el Dictionnaire Infernal, Astaroth es dibujado como un hombre desnudo con alas, manos y pies de dragón y un segundo par de alas con plumas bajo el principal, llevando una corona, sosteniendo una serpiente con una mano y cabalgando sobre un lobo o un perro.

Seduce por medio de la pereza, la vanidad, filosofías racionalistas de ver el mundo y su adversario es San Bartolomé, que puede proteger contra él porque venció las tentaciones de Astaroth. Inspira a los matemáticos, artesanos, pintores y otros artistas liberales, puede volver invisibles a los hombres, puede conducir a los hombres a tesoros escondidos que han sido enterrados por hechizos de magos y contesta a cualquier pregunta que se le formule en forma de letras y números en multitud de lenguas.



†Y aqui la letra de la rola que les comente al principio

De la noche de los tiempos
de tu oscuridad,
he regresado a buscar
un don para la humanidad.

Y no pronuncias mi nombre
aunque bien sabes quién soy,
de tu soberbia y tu odio
el reflejo alimentado soy.

Soy el eco de tu ira,
el espejo en que
tu avaricia se refleja
y me da poder.

Fluyo a través de las vidas
que no consiguen saber
dónde encontrar la salida
que abre la puerta del mal y el bien.

Ven hacia mí
y déjame morar en ti,
soy el deseo,
lo oscuro que hay en ti.
Compro tus sueños,
por tu alma, tu Dios,
¿cuánto da?.
Soy el que soy,
el portador de luz.

Cubra tu manto
mi luz y mi amor,
suave es el óbito
y dulce este dolor.
Tómame y el viento
te dará una canción
con el fuego eterno
que sellará nuestra unión.

"Toma mi sangre
mézclala, bébela y
quémala, arde en la llama,
pues sólo así podrás adorarme.
Haz lo que digo porque esta
es la ley. No me creas,
experimenta. Bebe,
pues no hay, no hay otro medio"

Ven hacia mí
y déjame morar en ti,
soy el deseo,
lo oscuro que hay en ti.
Compro tus sueños,
por tu alma, ¿tu Dios,
cuánto da?.
Soy el que soy,
el portador de luz.